Cómo cuidar de los libros antiguos

Cómo cuidar de los libros antiguos

Los libros antiguos son un gran negocio, incluso en la era electrónica. En 2002 una primera edición encuadernada de “Harry Potter y la piedra filosofal” de J. K. Rowling se vendió en una subasta de Sotheby’s por casi 20.000 dólares. El año pasado se vendió por 20 veces ese precio.

Si eres un lector, o si simplemente te gustan los libros, debes ser consciente de que puede haber dinero, y un tesoro de importancia histórica, en los tomos antiguos. Pero mantener tus libros viejos en buen estado puede ser un reto.

Fabricados con materiales naturales, como la tela, la madera y el cuero, los libros son propensos a deteriorarse. Son susceptibles de degradarse por la luz, el agua y la exposición al polvo.

Si tienes un libro antiguo, o simplemente quieres mantener tus libros antiguos con mejor aspecto durante más tiempo, estos consejos te ayudarán.

Cómo cuidar de los libros antiguos

Cuida el entorno

El lugar donde guardes tus libros tendrá mucho que ver con la duración de los mismos. Los libros deben estar alejados de la luz solar directa y de la humedad. Necesitan una temperatura estable, idealmente entre 18 y 21 °C y una buena circulación de aire para evitar la aparición de moho.

Una humedad relativa de alrededor del 50% es ideal para evitar que se sequen demasiado. Así que mantener los libros antiguos en un sótano o ático es siempre una mala idea.

La luz en general y la luz ultravioleta en particular pueden dañar los libros antiguos. Para mantener la vitalidad del material impreso, mantén los niveles de luz al mínimo y coloca filtros ultravioletas en las ventanas.

Escoge bien la estantería

Si piensas exponer libros viejos o antiguos, elige estanterías de cristal o esmaltadas, en lugar de estanterías de madera. La madera que no ha sido debidamente sellada puede transferir ácidos dañinos al papel y a las encuadernaciones de los libros antiguos.

A la hora de colocar la colección, evita el hacinamiento. Los libros amontonados se rozan entre sí al quitarlos y ponerlos en su lugar, dañando las cubiertas y posiblemente agrietando los lomos.

Los libros que comparten una misma estantería deben mantenerse en posición vertical, pero permitiendo un fácil acceso y un buen flujo de aire.

Cuidado con los libros altos

Los libros altos deben mantenerse en posición horizontal, para evitar que se deformen las encuadernaciones. Si apilas los libros grandes unos encima de otros, evita las pilas altas y retira siempre los libros de arriba antes de acceder a los de abajo.

Almacenamiento y conservación

Para que los libros antiguos reciban el mejor cuidado, guárdalos en cajas o fundas protectoras de materiales libres de ácido. Existen en el mercado contenedores diseñados para almacenar libros antiguos de forma segura, y también funcionan bien para mantener los documentos históricos.

Evita reparar las páginas de los libros con pegamento o cinta adhesiva, y no trates las encuadernaciones de cuero con aceites. Si un libro necesita ser reparado, consulta a un profesional antes de arriesgarte a reparaciones caseras.

Entendiendo el papel

También es importante que sepa en qué tipo de papel se imprimió el libro. Muchos de los libros producidos a finales del siglo XIX y a principios y mediados del siglo XX se hacían con papel de pulpa de madera de bajo coste.

Los papeles con alto contenido en algodón pueden durar indefinidamente, pero el papel de pulpa de madera es otra historia. El papel fabricado con pulpa de madera sin tratar libera ácidos fórmico, láctico, acético y oxálico con el tiempo.

La acumulación de ácidos amarillea y deteriora el papel, destruyéndolo. Existen tratamientos especiales para desacidificar el papel, pero siempre es una buena idea consultar a un conservador de libros antiguos antes de tratarlos por tu cuenta. Las técnicas de conservación de libros cambian constantemente, y es mejor consultar a los expertos antes de realizar cualquier modificación que pueda reducir el valor de tu inversión